La Vida

jueves, 8 de octubre de 2009

VIVIR EN LA VERDAD O VIVIR EN LA MENTIRA... Pensamiento simiente 8 de Octubre 2009


Esta reflexión es de Joaquín Tamames, seguida del pensamiento simiente de hoy.

Hoy hablamos de la autenticidad.

Cada vez más gente quiere vivir una vida auténtica, conscientes de que cada vez que elegimos conveniencia en vez de coherencia hay daños colaterales:

La dignidad, la honestidad, la verdad..., daños colaterales: una vez y otra, hasta que finalmente perdemos la humanidad.

En este tiempo de crisis se están desenmascarando muchas cosas, entre ellas las grandes contradicciones entre el dicho y el hecho. Yo reclamo austeridad, pero procuro que mi pensión de retiro sea estratosférica, yo proclamo valores pero en las páginas de mi periódico hay anuncios de prostitución, yo reclamo diálogo pero cuando me dirijo al otro le insulto... El cinismo está por todos lados y por eso las costuras se rompen: más bien estallan.

Esta divergencia entre lo que digo y lo que hago enferma primero mi estructura vital y luego la de la sociedad. Todos somos responsables, cada uno en nuestra pequeña o gran medida.

Cada uno hemos de barrer nuestra casa, limpiar el jardín interior, limpiar el corazón.

Los que lo hagan vivirán en otro plano: el de la autenticidad.

Los que no lo hagan seguirán viviendo en la mentira. Revolcados en el barro.

Tenemos que elegir. Y tenemos que elegir ya.



“Los humanos tienen la costumbre de responder al mal con el mal, al odio con el odio, y a la violencia con la violencia, pero esta vieja filosofía no puede dar buenos resultados. Es con el bien como nos oponemos al mal, es con el amor como eliminamos el odio, y es con la dulzura como se combate la violencia.

Si el mal termina siendo vencido es porque Dios le ha negado la inmortalidad. Toda palabra, todo acto de odio puede ser comparado a una piedra echada al aire: cuanto más tiempo transcurre, menor fuerza tiene para elevarse. Al contrario, una buena palabra, un acto de bondad puede ser comparado a una piedra que se echara desde lo alto de una torre: con el tiempo su movimiento y su poder se aceleran. Éste es el secreto del bien: es débil al principio, pero todopoderoso al final. El mal por el contrario es todopoderoso al principio, pero cada vez se va debilitando
.


Omraam Mikhaël Aïvanhov (1900-86). Pensamientos cotidianos
http://www.fundacionananta.org/
(Foto: Maqueta en barro, curso talla y escultura 2008. María)

12 comentarios:

Delia dijo...

Sabias reflexiones que nos hacen entender el porqué del fracaso de tantos intentos de cambios en la sociedad. Quienes han profundizado en esto afirman que es inútil tratar de enderezar la sombra del bastón, lo que está torcido es el bastón....entonces comencemos por ahí!!!
El mundo exterior es la proyección de nuestro mundo interno...por ahí debemos empezar.
Un abrazo.

gb dijo...

Buenas tardes MARIA DURGA

Cuando alguien con un ejercito quiere tomar un reino, ¿como empieza a luchar? uno a uno, casa a casa o ataca directamente al rey.
La batalla somos nosotros mismos el rey es SER, todo lo demás son velos y obstáculos que lo cubren y lo ocultan, por eso si solo nos centramos en lo principal lo demás viene por si solo.

namasté

pranava

pd. lo que es del SER que siga con ÉL, lo otro solo endulzaría al ego.

thot dijo...

Tanto la reflexión de Tamames como el pensamiento simiente merecerían estar en un sitio que nos permitiera leerlo todos los días hasta interiorizarlos profundamente.
Un beso María.

Silvia García dijo...

"La dignidad, la honestidad, la verdad"
Tres palabras esenciales para poder mínimamente esperar un cambio, aunque sea pequeño.
Desde luego empezando desde nosotros mismos, solo así podrá extenderse y cubrir de a poco a todos, a esta sociedad diezmada por la corrupción, los negociados y la mentira.
María, esta entrada es imperdible.
VIVIR EN LA VERDAD.
No hay otro modo.
Abrazos desde el alma
Silvia

ROSA dijo...

Preciosos pensamiento para tener siempre en cuenta
Un placer leerte mi querida amiga
Un besito Rosa

Poseidón dijo...

hola MARIA,

tb creo que es asi como dices eso :

“Los humanos tienen la costumbre de responder al mal con el mal, al odio con el odio, y a la violencia con la violencia, pero esta vieja filosofía no puede dar buenos resultados. Es con el bien como nos oponemos al mal, es con el amor como eliminamos el odio, y es con la dulzura como se combate la violencia."

Prefiero vivri con la verdad porque nos da libertad!

Me gusta tu blog.

feliz dia

adolfo payés dijo...

Quiero compartir con tu blog un premio. Puedes pasar por el en esta dirección del blog...

http://aapayes.blogspot.com/

Un abrazo
Saludos fraternos

Que tengas un buen fin de semana..

Gizela dijo...

precioso pensamiento
Me encanta el símil de la piedra!!!
Nunca lo había pensado así, pero leído aquí, es tan gráfico como una buena pintura.
Besos María.
Gizz

Juan Antonio dijo...

María

Me llevé una grata sorpresa el verte en el blog de Toñi. Siempre veía tu blog y que no había actividad desde marzo.

Ahora puedo percatarme que tienes otro que es muy bueno. Te felicito.

Juan Antonio

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Hola, María...

Ante todo, debe estar la honestidad en nuestras actuaciones, para no caer en contradicciones.

Será mejor: ¿Practicar lo que se predica o predicar lo que se practica?

Abrazos.

Unknown dijo...

Maria, una entrada concreta, sincera y reflexiva, me gustó mucho y como puedes comprender lo comparto y lo tomo hoy martes como herramienta de trabajo para no vivir en esa "disociacion", continua que tenemos entre decir una cosa y hacer otra, es verdad.. que no se puede tolerar y que a esa tarea hay que ponerse todos en nuestra parcela individual.

Un abrazo muy fuerte lo mas sincero posible.

alicia dijo...

aprender a descubrir la verdad de nuestro sentir, requiere discernimiento.
Gracias.
Alicia.